Jueza ordena prisión de empleada de Javier Ibarra y explica por qué
A pedido de los fiscales Gerardo Mosqueira y Andrés Arriola, la Justicia admitió la imputación contra Aida María Villalba por hurto especialmente grave, debido a que en sus manos se encontrron restos de antimonio, por lo que se sospecha que la mujer se llevó el arma de la que salieron las balas que acabaron con la vida de Ibarra.
Los fiscales solicitaron aplicar la medida de arresto domiciliario, pero la magistrada Elsa Idoyaga decretó prisión preventiva.
Al respecto, Idoyaga explicó que existe peligro de fuga y obstrucción a la investigación, debido a que la procesada no cuenta con domicilio fijo.
A esto se suma el sinnúmero de dificultades presentadas ayer para las diligencias. La audiencia de imposición de medidas fue convocada para las 19:00. Al inicio, la mujer dijo sentirse mal, por lo que la magistrada ordenó el traslado al Hospital de Clínicas.
“Tuve que ir con mi actuaria y mi equipo forense a ver la situación, se le hizo los estudios y el forense determinó que estaba en condiciones de participar de la audiencia. Continuamos hasta las 23:00, pero la defensa técnica en su planteamiento no ofreció nada, no tiene arraigo”, contó la jueza.
La expectativa de pena por hurto especialmente grave es de 10 años. Este elemento y las casi seis horas que llevó el desarrollo de una audiencia, además de la carencia de domicilio fijo, llevaron a tomar la decisión de decretar prisión.
